Como toda buena idea, Rumbo Lúdico nació de un problema y de una solución ingeniosa. Cuando Natalia Salgado Obregón, psicóloga de profesión y entusiasta de los juegos, se enfrentó a un caso clínico que superaba las herramientas que tenía a mano, decidió probar algo distinto.
“Era una adolescente con un caso complejo y estaba siendo muy difícil que conectara con los objetivos terapéuticos”, contó.
Ante el problema, la respuesta nació del ingenio y la necesidad: dibujar cartas para externalizar las emociones y lograr conectar con ellas. Así nació Quest Me, una herramienta terapéutica transformada en juego de mesa que en pocas semanas revirtió la frustración y permitió que la intervención con la adolescente siguiera avanzando de acuerdo a los objetivos planteados.
Cómo nació Rumbo Lúdico
Después de eso, la idea cobró fuerza y se transformó en Rumbo Lúdico, una iniciativa compuesta por un equipo de profesionales de distintas áreas, motivado por la convicción de que los juegos pueden hacer el mundo mejor.
“Lo que hacemos es gamificar la psicología y generar productos que persiguen metas clínicas, profesionales o de cambio, pero con forma de juego de mesa. Eso actualmente se ha ampliado y también ofrecemos experiencias gamificadas a empresas, siempre orientadas a objetivos concretos que favorezcan la salud mental de las personas que participan”, explicó Natalia.
El equipo lo completan el psicólogo Francisco Durán, la diseñadora industrial María Paz Arzola y el diseñador gráfico Matías Cadiú.
El nuevo rumbo
El pasado 21 de agosto el equipo presentó la nueva imagen corporativa, donde esbozaron los desafíos que se plantean para el futuro.
“Estos hitos de cambio reflejan procesos de transformación y el mensaje que queremos entregar. El hecho de que hoy hubiera un público tan diverso quiere decir que no somos los únicos, y que hay gente a la que está llegando el mensaje de Rumbo”, explicó la psicóloga.
Entre los desafíos venideros está el estreno de una versión de bolsillo de Quest Me para trabajar en grupos y otros títulos que deberán ver la luz en el corto y mediano plazo.
“Esperamos este año poder sacar dos juegos más que estamos desarrollando. Uno está orientado principalmente a adolescentes, justamente por el vacío de elementos entretenidos con abordaje clínico. Se creó en 2019, entonces ha tenido un proceso de crecimiento bien extenso”, contó la fundadora de Rumbo Lúdico.
Explicó que la propuesta se puede usar para diagnosticar y para intervenir: “la verdad es que está creada para adolescentes, pero la hemos usado con niños de 9 años y también con adultos, y todos logran de una u otra manera identificarse con las cartas”, detalló.
No sólo psicología
En Rumbo Lúdico defienden la idea de que la psicología está en todas partes. Por eso, consultados por otras áreas donde podrían utilizarse sus creaciones, señalaron que “estamos desarrollando también productos para empresas, porque en el fondo la salud mental está en todos los espacios, siempre requiere ser intervenida, siempre influye en el desempeño, y en todos esos ámbitos podemos trabajarla con un juego.
“Hay juegos en el mercado que, si uno es profesional y tiene experiencia para usarlos, son muy efectivos. Nosotros partimos al revés: generamos elementos terapéuticos desde la psicología. Pero el desafío que tenemos ahora es ambicioso: nos interesa que también los puedan jugar personas que no son profesionales y que les sirvan para comprender y conectar con distintas experiencias”, concluyeron.