Una de las discusiones más recurrentes en torno a Catan es la percepción de que la suerte es la gran protagonista del tablero. Cada tirada de los dos dados de seis caras se vive como un ritual: algunos cruzan los dedos, otros se encomiendan a sus dioses favoritos, esperando que justo ese número los acerque a la victoria. Pero ¿qué dicen realmente los estudios y la experiencia competitiva? ¿Tienes mala suerte o es falta de experiencia?
Es cierto que Catan incorpora factores de azar: los dados, las cartas de desarrollo, el mapa inicial de recursos o el orden de los turnos. Sin embargo, la investigación muestra que estos elementos no definen por completo el resultado. Un estudio reciente publicado en arXiv (Seeding for Success: Skill and Stochasticity in Tabletop Games, J. Goodman, D. Perez-Liebana and S. Lucas., 2025) concluye que, aunque los dados y las cartas influyen en el corto plazo, los jugadores más hábiles suelen imponerse. La colocación inicial en puntos de alta probabilidad, la diversificación de recursos y la negociación efectiva reducen considerablemente la dependencia de la fortuna.
Otros trabajos han profundizado en esta idea desde distintos ángulos. David Richeson (2010), en The Mathematics ofCatan, mostró que la frecuencia desigual de los números en los dados (6 y 8 son mucho más probables que 2 o 12) debería orientar la primera decisión: dónde colocar el asentamiento inicial. Random Chance in Settlers of Catan(2018) reforzó esta visión al demostrar que la productividad del mapa es más decisiva que el lanzamiento de dados, mientras que Game Strategies for The Settlers of Catan(2014) resaltó la necesidad de mantener planes de expansión flexibles ante los cambios de la partida.
En el terreno de la inteligencia artificial también hay hallazgos reveladores. Szita, Chaslot & Spronck (2009), mediante millones de simulaciones con Monte Carlo TreeSearch, evidenciaron que el orden de turno afecta de manera crítica las probabilidades de victoria: salir primero no es lo mismo que salir cuarto. Ortiz-Bayliss et al. (2008), desde la UC3M, construyeron el agente CLIPS Strategic Assistant, mostrando que el comercio es un mecanismo potente para compensar la mala fortuna, aunque los humanos suelen negociar con mayor flexibilidad que las máquinas. Finalmente, Deep Catan (Driss & Cazenave, 2022) subrayó que las cartas de desarrollo son mucho más que un recurso complementario: su uso oportuno —en especial los caballeros para controlar el ladrón y las cartas de progreso en momentos críticos— puede inclinar partidas muy ajustadas y reducir el impacto del azar.
En el plano competitivo, los testimonios coinciden con lasinvestigaciones. Bo Peng, campeón nacional de Estados Unidos en 2021, explicó en Colonist.io que cerca del 50% del juego se define en las colocaciones iniciales. Más aún, en su blog The Art of Catan (2023) sostuvo que el juego es “80% habilidad y 20% suerte”, y detalló que el peso se reparte entre ubicación inicial (30%), toma de decisiones (25%), negociación (20%), dados (15%), cartas de desarrollo (5%) y gestión de la mano (5%). Para él, su récord de 10-0 en el campeonato es prueba de que la estrategia consistente supera a la fortuna.
Treeckosaurus, ex #1 mundial en Colonist y bicampeón de Catan, declaró en Colonist.io (2022) que estima el balance en 70% habilidad y 30% suerte. Para reducir la variabilidad, propone tácticas como el Double Road Gambit, que consiste en colocar dos carreteras tempranas para asegurar una intersección clave y bloquear rivales, incluso si parece arriesgado al inicio.
Catan no es un juego “dominado por la suerte”, como suele caricaturizarse. Es un tablero de decisiones bajo incertidumbre, donde el azar abre y cierra puertas, pero el verdadero peso recae en quienes saben interpretar probabilidades, elegir posiciones iniciales sólidas, adaptarse con flexibilidad, buen uso de desarrollos y negociar con inteligencia. La evidencia es clara: los estudios muestran que la suerte influye, pero no define, y los campeones confirman que la experiencia acumulada es lo que marca la diferencia. Esa experiencia solo se construye jugando: corrigiendo errores, aprendiendo de cada partida y aprovechando mejor las oportunidades de comercio y los fallos ajenos. Con más juegos llegan menos nervios, menos errores y más victorias. Porque en Catan, “a veces se gana y otras veces se aprende”.
¿Y para ti? ¿es suerte o experiencia?