Durante la adolescencia, el cerebro cambia a toda velocidad. Y con esos cambios, muchas veces también disminuye la motivación por aprender. Las clases pueden parecer lejanas, monótonas o poco desafiantes. Frente a este escenario, un grupo de investigadoras de la Universidad Mayor se preguntó si el uso de juegos de mesa podría tener un rol que vaya más allá del simple entretenimiento.
La respuesta, tras revisar 19 estudios empíricos realizados entre 2019 y 2023, fue afirmativa: los juegos de mesa tienen un impacto positivo tanto en el aprendizaje conceptual como en el desarrollo de habilidades socioemocionales en adolescentes entre 10 y 19 años.
Más allá del contenido: habilidades clave
Según los resultados, todas las implementaciones analizadas reportaron mejoras en el aprendizaje. En un 58% de los casos, dichas mejoras fueron estadísticamente significativas. Además del conocimiento disciplinar, se destacó el desarrollo de habilidades como la toma de decisiones, el pensamiento crítico, la cooperación, la comunicación y la socialización.
Uno de los hallazgos más consistentes fue el aumento de la motivación. En el 79% de los estudios se observó una mejora en esta dimensión, muchas veces acompañada de emociones positivas asociadas al aprendizaje, como el disfrute, la curiosidad y el interés sostenido.
El rol del juego en la experiencia educativa
La revisión también sugiere que los juegos de mesa pueden facilitar la entrada en el llamado flow state, un estado de concentración plena en el que la persona se involucra profundamente con la tarea. Este tipo de experiencias, difíciles de lograr en entornos educativos tradicionales, fueron descritas como frecuentes durante las sesiones de juego.
En términos generales, los autores plantean que los juegos de mesa no deberían verse como una estrategia marginal o decorativa, sino como herramientas complementarias que permiten conectar con las emociones, intereses y modos de socializar propios de la adolescencia. Todo esto, sin dejar de lado los objetivos académicos.
El estudio completo está disponible en la edición 52 de la Revista de Estudios y Experiencias en Educación, bajo el título “Juegos de mesa como inductor de la Motivación para el aprendizaje en adolescentes: Una revisión sistemática”, de Lilian Gutiérrez-Medina, Geraldine Arrué-Quezada y Lucía Illanes-Aguilar.